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Le ayudo a sanar, brindándote conocimiento y herramientas. Experto en enfermedades reumáticas, artritis, fibromialgia, fatiga crónica y dolor crónico . Contacto : https://www.patreon.com/karimanesr

Pasar hambre, una nueva forma de calmar el dolor

Un estudio de la Universidad de Pensilvania establece que pasar hambre elimina la percepción del dolor crónico.

Pasar hambre, una nueva forma de calmar el dolor

Según una investigación realizada por neurocientíficos de la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, el cerebro tiene una forma de suprimir el dolor crónico cuando un animal está hambriento, lo que le permite buscar alimento y dejar intacta la respuesta al dolor agudo. Su trabajo identificó una pequeña población de 300 células cerebrales responsables de la capacidad de priorizar el hambre sobre el dolor crónico, un grupo de neuronas que pueden ofrecer objetivos para nuevas terapias contra el dolor.

 

Según esta investigacion se concluye que la sensación de hambre puede ayudar a paliar el dolor crónico de carácter inflamatorio, con todo lo que eso podría suponer para el futuro desarrollo de nuevos fármacos analgésicos.

 

El dolor agudo es un sistema natural de defensa que tiene nuestro organismo para impedir que soportemos más de la cuenta estímulos peligrosos. Esto lo convierte en una herramienta muy necesaria sin la que la vida de una persona se complica mucho.

 

Pero cuando el dolor está presente durante largos periodos o en algunos casos llega a ser continuo, suele ser a consecuencia de algún tipo de inflamación. Este dolor habitual o continuo puede convertir la vida de la persona que lo padece en un verdadero infierno al no encontrar alivio en ninguna medicina o terapia.

 

Esta investigación realizada por neurocientíficos, establece que el cerebro tiene una forma de eliminar o desviar la atención del dolor crónico cuando un animal está hambriento, esto le permite buscar alimento y a la vez deja intacta la respuesta al dolor agudo. El trabajo identificó una pequeña población de 300 células cerebrales responsables de la capacidad de priorizar el hambre sobre el dolor crónico, un grupo de neuronas que pueden ofrecer objetivos para nuevas terapias contra el dolor.

 

Para llegar a esta conclusión, se analizaron las reacciones de un grupo de ratones frente al dolor agudo o crónico. Los dividieron en dos grupos: dejando a unos 24 horas sin comer nada y a los otros les dieron de comer antes de la prueba.

Frente a estímulos de dolor agudo, no encontraron diferencias destacables en los dos grupos, pero sí que se hallaron en el caso del dolor crónico de origen inflamatorio, pues los del grupo que habían comido evitaron el lugar en el que se les había causado el dolor agudo, mientras que los que tenían hambre no dudaron en volver hasta allí.

 

Para demostrar la inhibición del dolor,se repitió el experimento, pero esta vez administrando un analgésico a los ratones, que reaccionaron exactamente igual que los que llevaban tiempo sin comer.

 

"En neurociencia somos muy buenos para estudiar un comportamiento a la vez -dice J. Nicholas Betley, profesor asistente de Biología en la Facultad de Artes y Ciencias de Penn-. Mi laboratorio estudia el hambre y podemos encontrar neuronas que hacen que estés hambriento y manipular esas neuronas y controlar su actividad. Pero en el mundo real, las cosas no son tan simples. No estás en una situación aislada donde solo estás hambriento. Esta investigación fue para tratar de entender cómo un animal integra múltiples necesidades para llegar a una conclusión conductual que es óptima”.

 

No establecimos tener esta expectativa de que el hambre influiría en la sensación de dolor de manera tan significativa .dice Amber Alhadeff, de la Universidad de Pensilvania-, pero cuando vimos que estos comportamientos se desarrollaban ante nosotros, tenía sentido. Si eres un animal, no importa si tienes una lesión, debes ser capaz de superarla para encontrar los nutrientes que necesitas para sobrevivir”.

 

El laboratorio de Betley se ha centrado en estudiar el hambre, en particular, cómo el hambre puede alterar la percepción. Intrigados por cómo el hambre puede interactuar con la sensación de dolor, los investigadores, cuyo trabajo se publica en la revista 'Cell', observaron cómo los ratones que no habían comido durante 24 horas respondían al dolor agudo o al dolor inflamatorio a largo plazo, que se cree que involucra la sensibilización de los circuitos neuronales en el cerebro.

 

El equipo estableció que los ratones con hambre seguían respondiendo a los estímulos dolorosos externos, pero mostraban ser menos receptivos al dolor inflamatorio que sus congéneres bien alimentados.

 

La relación entre el hambre y la ausencia del dolor parecía demostrada, pero su causa seguía siendo un misterio, por lo que a continuación procedieron a activar experimentalmente las AgRP, un grupo de neuronas activadas normalmente en periodos de inanición.

 

Se reprodujeron los resultados, pero los investigadores repitieron el procedimiento activando de una en una las distintas subpoblaciones neuronales distribuidas por el cerebro para finalmente comprobar que bastaba con activar un pequeño grupo de 300 neuronas situadas en el núcleo parabraquial para paliar el dolor crónico.

 

Sin duda se trata de unos resultados muy positivos de cara a la búsqueda de nuevos analgésicos que sean capaces de actuar sobre ese grupo de neuronas.

 

La relación entre el hambre y la ausencia del dolor parecía demostrada, pero su causa seguía siendo un misterio, por lo que a continuación procedieron a activar experimentalmente las AgRP, un grupo de neuronas activadas normalmente en periodos de inanición.

 

Se reprodujeron los resultados, pero los investigadores repitieron el procedimiento activando de una en una las distintas subpoblaciones neuronales distribuidas por el cerebro para finalmente comprobar que bastaba con activar un pequeño grupo de 300 neuronas situadas en el núcleo parabraquial para paliar el dolor crónico.

 

Sin duda se trata de unos resultados muy positivos de cara a la búsqueda de nuevos analgésicos que sean capaces de actuar sobre ese grupo de neuronas.

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Acerca de mí
Karim A Nesr

Le ayudo a sanar, brindándole conocimiento y herramientas. Experto en enfermedades reumáticas, artritis, fibromialgia, fatiga crónica y dolor crónico. Cuento con un magnífico equipo multidiciplinar de almas rebeldes, tenemos en común los huevos y las patatas fritas patreon.com/karimanesr

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K
Cuando he tenido crisis con dolor generalizado(por fm)he realizado ayunos hasta por tres días y siento que mi dolor baja de intencidad , no desaparece pero es mas sobrellevable ,me parece genial que la neurociencia realice estudios para seguir buscando alternativas para el dolor crónico .
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U
Esta nota parece una burla. Encima de todo lo que tenemos que sobrellevar, PASAR HAMBRE. Porque "un grupo de científicos" que seguro ninguno tiene la enfermedad detecta supuestamente que si no comemos tenemos más hambre, y si te duele el hambre te olvidás de que te duele el resto del cuerpo? Gastan dinero en este tipo de estudios ridículos en vez de buscar un tratamiento eficaz, nos llenan de pastillas para calmar los síntomas, pero nunca para curar...buen negocio les resultamos a la industria de la salud!!! Asco y vergüenza ajena me dan!
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F
Es un estudio, cada uno debe experimentar lo que le va mejor, pero hay que compartir estos estudios. Gracias por tu opinión, un abrazo y mucha fuerza